viernes, 18 de enero de 2013

Lanús en los primeros puestos


por Dario Tavolaro* 

Desde hace décadas no se ve a un gobierno democrático signar a su pueblo en el más absoluto de los desamparos en términos de seguridad, justicia, educación o salud. Ni mencionar los altos niveles de corrupción, la precarización del trabajo y la destrucción sistemática de la industria nacional.
Si queremos vislumbrar nuestro futuro sólo debemos observar el legado, y ello son nuestros jóvenes. Lanús es un vivo ejemplo de ello.
Una de las pruebas más evidentes de que este gobierno es en realidad un monumento a la corrupción, la marginación y la exclusión, es la inseguridad que reina en la Argentina donde hechos delictivos monstruosos son cometidos generalmente por adolescentes
Nuestros jóvenes son en muchos casos una desgracia aunque debieran ser una esperanza. Pero el extenso brazo del distribucionismo que impulsó el deterioro de esta generación, produjo jóvenes sin oficios, sin capacitación y sin expectativas futuras. Nunca se apostó a la producción ni se estimuló la cultura del trabajo, por el contrario. Se sostuvo voluntades compradas a base de retenciones e impuestos en escalada creciente. No existe en lo mas mínimo un plan de inclusión porque si realmente este gobierno fuera de inclusión los jóvenes vivirían su vida, pero no tienen presente ni ven que tengan futuro, entonces se drogan y se autodestruyen.
Los jóvenes que ven su futuro con desesperanza se seguirán drogando para evadir esta realidad monstruosa en la que los gobernantes de turno y su sequito de socios y aplaudidores los tienen sumergidos, y seguirán comprando droga en forma clandestina o en forma libre con beneficios en este caso también para el estado representado por ellos mismos, y seguirán aumentando impuestos, vaciando cajas como la de el ANSES para poder sustentar una
adhesión ideológica mentirosa y oportunista. Y los jóvenes excluidos que no tendrán trabajo ni posibilidades adecuadas para desarrollar su vida saldrán a cometer delitos como lo vienen haciendo hasta ahora y con el producto de los ilícitos comprarán droga beneficiando con esa compra tanto a los narcotraficantes como a este Estado corrupto lleno de mafias policiales y judiciales contra las que tampoco se hace nada.
Condenar a una generación a vivir de la dádiva del estado, es excluirlos, marginarlos, multiplicar la pobreza pero con la creencia de que se traducirán en votos, en verdad al estado no les interesa en lo mas mínimo sus jóvenes. 
Pero, nada más alejado de la verdad. Esta generación que debiera encarnar nuestro futuro hoy solo muestra un panorama a corto o mediano plazo, verdaderamente devastador.
Nosotros, los que peinamos canas, seguiremos luchando para recuperar al país, y en nuestro caso, a Lanús de la destrucción de este desgobierno y devolver al ciudadano la alegría de caminar por las calles sin miedo, y a no seguir llenando de rejas sus viviendas, porque los decentes y honrados somos nosotros y no merecemos vivir tras rejas.
 (*) Dirigente de Unión por Todos provincia de Buenos Aires