viernes, 30 de agosto de 2013

Oliden: la plaza de la discordia

por Marta Santos

Finalmente pareciera que el conflicto entre vecinos y municipalidad tiende a encarrilarse, con el asentimiento del intendente -según sus concejales- para pedir la expropiación de la parcela que ocupa la plaza de Oliden y Chile para uso público. Este pedido deberá sumarse al proyecto de ley que el diputado  moyanista Héctor Martínez  presentó  previamente en la Legislatura bonaerense, y que fuera apoyado por el proyecto de declaración de Salvador Baratta en el HCD local.
Sin embargo hubo forcejeos con Gestión Ambiental municipal porque el predio pertenecería a la empresa que, cerca mediante, está construyendo sus depósitos en el terreno con el que linda. Los juegos para chicos fueron arrancados con una máquina que comenzó a remover la tierra y yacen tirados en un rincón. La llovizna y el frío hacen que, en la tarde, el coraje de los vecinos tome relevancia: están allí, cuidando lo que consideran suyo, a pesar de todo.
La historia empezó cuando la fábrica Papini cerró y todo quedó abandonado. “Hace alrededor de 25 años que usamos ese terreno como plaza”, cuenta Abel Fiol, uno de los vecinos que tomó esta pelea como propia. “Nuestros chicos caminaron allí, jugaron y aprendieron a andar en bicicleta en ese lugar. Si bien en verano los adultos no vamos tanto -y esto es porque no
colocaron nunca ni un solo árbol- la municipalidad de tanto en tanto manda a limpiar, cortar el pasto o acondicionar los juegos. Los vecinos cortamos el pasto muchas veces, sobre todo en épocas estivales. Pero los chicos y jóvenes la usan sin problemas”, explicó. “A principios de año vimos movimientos, sobre todo porque vinieron técnicos a revisar el suelo y desde ese momento intentamos averiguar qué pasaba, pero el lunes posterior a las elecciones llegaron con las máquinas y removieron el suelo, arrancando los juegos. Allí fue cuando todos vinimos a la plaza y les impedimos que siguieran con la destrucción. Intentamos hablar con el intendente pero siempre nos recibieron funcionarios de segunda línea. En Gestión Ambiental la secretaria Lara Villalba nos mal atendió, diciendo que como el predio tenía propietario la plaza dejaría de existir. El trato fue malísimo. Nunca pudimos reunirnos con el intendente ni con el  propietario de la tierra, que es de uso público desde hace más de 20 años”, agregó.
Pero esta semana hubo novedades. El lunes fueron al Concejo Deliberante: estuvieron con Mary La Rosa (que acompañó a los vecinos desde el primer reclamo y estuvo documentando el tema del propietario)  y Oscar López , con Baratta, con ediles del Pro.  Fueron a hablar con los ediles oficialistas “que nos defraudaron en ese momento. Una de ellas al final se acercó a pedir que le explicáramos bien las cosas (se trata de Luciana Agustavicius) pero nos fuimos bastante desilusionados. La noticia de última hora fue la del miércoles: “ Vinieron a vernos 4 ediles  (foto) entre los que estaban Héctor Montero y Agustavicius y nos dijeron que habían hablado con el intendente y les había indicado que se haría un pedido de expropiación en la legislatura bonaerense, declarando el lugar como de utilidad pública. Así que ahora estamos expectantes, esperando que cumplan. El PO, aunque no tiene representatividad en el concejo, también nos apoya. Y los ediles radicales nos llamaron por teléfono, apoyándonos. O sea que esperamos que el viernes, en la sesión, este apoyo sea de todos y se manifieste”. Mientras tanto seguirán alerta a los movimientos en la plaza y no abandonarán el lugar.
Lo que no se dijo es que el lunes Agustavicius hizo una encendida defensa de la propiedad privada cuando los vecinos fueron al HCD, y que sólo al final de la entrevista se “interesó” en conocer toda la historia. Y aquí debemos volver al sábado: Mabel Gagino estaba en la plaza  tomando conocimiento del tema y  expresó que “los concejales nuestros de Avellaneda están esperando que nosotros hagamos una declaración al respecto para manifestar su apoyo con una similar desde su HCD. Creo que en esto estaremos todos de acuerdo”, ya que la plaza está en Lanús pero sobre la calle que delimita los dos distritos. El sábado junto a Gagino, también estuvieron La Rosa y el asesor de Baratta, el doctor Hernán Colombo Russell, quien les llevó a los vecinos las copias del pedido de expropiación del diputado y de la declaración del edil. O sea que Gagino tenía conocimiento de la situación y Agustavicius parecía no saber nada. Tampoco contó el entrevistado que el martes un grupo de manifestantes enviados no se sabe por quién fue con sus redoblantes y echó a los vecinos de la plaza, según trascendió.
El sábado en la tarde la llovizna era pertinaz y fría. Me fui de plaza lastimada, mientras los vecinos se refugiaban bajo un toldo vecino. Atrás quedaban el mate y las tortas fritas.