martes, 9 de septiembre de 2014

Vecinos abandonados, funcionarios escrafulosos y concejales cómplices

  “Nuevamente tengo que recurrir a usted señor director de La Defensa -dice Eduardo Ugarte- pero es la única manera que tengo de hacer conocer la penosa realidad de Villa Jardín y aledaños. Ayer fueron las escuelas cerradas y sin solución, hoy estamos literalmente bajo el agua. Acá no funcionan los pocos pluviales que tenemos y encima la desgracia del famoso canal aliviador que rompió toda la calle Manuel Maza y la obra está parada porque las paredes del pozo se desmoronan.Todo esto con los colectivos que pasan por donde pueden o no pasan, más la marginalidad, las narcobanditas y la connivencia político-policial fomentan un coctel realmente peligroso. En Villa Jardín no hay hambre: hay marginalidad y desidia estatal. El municipio no cubre los servicios básicos, en vez de comedores y merenderos precisamos urbanización, mejores condiciones de vida y seguridad”.
  Ugarte es dirigente del massismo que tiene nada menos que ocho concejales en Lanús.
 Los ediles de todo signo suelen ir a Jardín o a las villas similares, a hacer fiestitas y chocolatadas, pero no denuncian ante la justicia los robos que en Lanús se están cometiendo con las obras públicas.