Poco antes de las once (pensando que la extraordinaria sería a esa hora) los vehículos de transporte escolar cortaron la cuadra de 9 de julio, entre Salta y Córdoba, volcando a sus ocupantes masivamente sobre el concejo, de tal modo que coparon la playa de estacionamiento y forcejearon puertas para entrar a la casa, rompieron cerraduras y causaron diversos daños a los autos que estaban en el estacionamiento del concejo (ver nota aparte).
Protección Ciudadana no estaba, la policía tampoco. Lo cierto es que, como se supo más tarde, desde ayer los oficialistas sabían lo que habían preparado para hoy. Omar López y
Héctor Bonfiglio hacían de “mediadores”, olvidando el presidente que es responsable de la seguridad de la casa y de quienes están allí y demorando el llamado a la policía, quien llegó cuando los ediles y empleados ya habían sufrido el apriete de los convocados. ¿Por quién? Américo Peralta, el tristemente célebre “Monito” Rodríguez y otros punteros intercambiaban llamados por sus móviles. Se dijo que eran barras de Laferrere mezclados con los locales, reforzando la amenaza.
Dentro del Concejo, los ediles negociaban, presionados por la situación. Todos hablaban –dentro y fuera- del convenio de los $600 millones para la red eléctrica y de que hoy los opositores darían quórum “porque si no nadie sale”. No había información, los ediles no estaban para responder nada hasta que los atrapó la vorágine de la sesión, que también fue confusa: muchos estaban distraídos, hablaban entre sí o se volcaban a comunicaciones por sus celulares. Las chicanas abundaban, ridículas algunas, como si los que seguimos las sesiones no supiéramos que lo que hacen algunos hoy es lo mismo que hicieron otro día los que ahora juzgan.
Lo cierto es que en la confusión muchos creímos que estaban aprobando el convenio de los 600 millones. Nos equivocamos. Lo que aprobaron es una declaración de emergencia eléctrica, realizada a último momento -porque la anterior estaba vencida- que mereció festejo porque en el art. 2 se establece que “…el Departamento Ejecutivo dispondrá la realización de obras de infraestructura adecuadas, conforme a los recursos con los que cuente, para ampliar y renovar redes de distribución en zonas en desarrollo y escasos recursos del partido”.. El art. 4º., por su parte, establece: “Autorízase al D. E. a realizar todas las contrataciones y erogaciones que técnica y legalmente correspondan, conforme a lo establecido en la Ley Orgánica, en el marco de la emergencia declarada para concretar los trabajos necesarios”. Según algunas fuentes, el oficialismo entendió que con esa ordenanza podrá hacer uso indiscriminado de los fondos a enviarse, sin tener que dar cuentas al Deliberativo. Sin embargo, esta postura fue rechazada de plano desde algunos sectores de la oposición, los cuales recordaron que la emergencia no libera al Ejecutivo de someter la convalidación de convenios a la aprobación del HCD.
¿Qué habrían negociado los ediles? A cambio de esto, los expedientes por la creación de nuevos cargos no se trataron hoy, sino que fueron pasados a comisión. Y, en lo que respecta al tema del tendido eléctrico, se creó una comisión especial de seguimiento de las obras de infraestructura que reemplaza, malamente, algunos artículos del proyecto que presentara el FR, cuya autoría es de Hernán Colombo Russell: mientras que el proyecto original le fijaba obligaciones concretas al ejecutivo, la ordenanza sancionada diluye en conceptos generales la obligación de informar sobre las obras si la comisión lo requiere.
O sea: los ediles opositores cedieron al apriete, dando lugar a que esto pueda repetirse cada vez que intenten poner una negativa a expedientes enviados por el intendente. Ya sabemos cómo se hace: les mandan a “los muchachos”, con sus bombos y su violencia y el oficialismo logra lo que quiere.
Se aprobó el convenio por las escuelas
Presenciaron la sesión extraordinaria delegados de los docentes, ya que uno de los convenios a validar se está ejecutando y refiere a la reparación de edificios escolares . Por la falta de aprobación están detenidas las licitaciones de las obras, que debían efectuarse hoy. Finalmente, fue uno de los convenios que se aprobaron en la sesión.
¿Los concejales no son funcionarios?
Dos perlitas de hoy, en la sesión: la concejal Mabel Gagino aseveró, convencida: “Los concejales no somos funcionarios, somos legisladores!”, olvidándose que son funcionarios todos los que están en la función pública, aunque tengan un cargo superior o hayan sido elegidos por el voto popular.
Y la yapa: frente a las encendidas acusaciones de Jorge Montero respecto a la falta de quórum en las fallidas sesiones anteriores, Nicolás Russo le espetó: “Vos sabías lo que se estaba armando porque ayer me dijiste que iba a haber problemas!”, en clara referencia a la manifestación patoteril de los manifestantes.
¿No hay denuncia policial?
En tanto desde Libres del Sur, Pablo Arburúa repudia “estas prácticas mafiosas y solicitamos a los concejales que hagan la respectiva denuncia policial”. Y por su parte Isadora Fieste pide “la intervención del Sindicato de Trabajadores Municipales para que actúen en defensa de sus trabajadores que hoy se sintieron en peligro”, ante la amenaza de los manifestantes que decían que iban a prender fuego el concejo “con todos adentro”.
Marta Santos
