miércoles, 24 de junio de 2015

La semana en pocas palabras

Informe Económico Semanal del Banco Ciudad

En un contexto en el que el gobierno sigue empleando el tipo de cambio oficial como única ancla nominal, manteniendo una pauta de devaluación mensual del 1%, las cotizaciones alternativas del dólar volvieron a experimentar un repunte en los últimos días. El dólar “blue”, que se movía en torno a $12,60 en la primera quincena de junio, saltó por encima de los $13 por primera vez en tres meses, experimentando un alza de 3% en la última semana. En tanto, el dólar “contado con liquidación”, con igual tendencia, subió a $12,30, registrando un incremento de casi 6% respecto al mínimo del mes ($11,6), de manera que la brecha con el dólar oficial pasó de 39% a 44% en el caso del “blue” y del 29% al 36% en el del “contado con
liquidación”.
Estos movimientos, si bien todavía relativamente moderados, parecen constituir un primer anticipo del clásico ruido pre-electoral, capturando los precios del billete informal la última información vinculada al cierre de listas de candidatos de los principales partidos políticos, especialmente del oficialismo, con señales en pos de continuidad de las actuales políticas económicas y financieras.
El alza del dólar “blue” también estuvo influida por el descenso que han venido experimentando las ventas de “dólar ahorro”, lo cual redujo la oferta de divisas en el mercado informal. Las ventas de “dólar ahorro”, que habían superado cómodamente los USD 500 millones entre enero y abril, disminuyeron a USD 443 millones en mayo y apuntan a ubicarse nuevamente por debajo de los USD 500 millones en junio. Este descenso en las ventas de “dólar ahorro” se dio en un contexto en el que venía disminuyendo el rendimiento de realizar el arbitraje entre el mercado formal y el informal (compra de “dólar ahorro” y posterior venta en el mercado paralelo, operatoria que en la jerga financiera es conocida como “puré”), desde un 36% en diciembre a un 16% a inicios de junio, acompañando el descenso de la brecha cambiaria durante dicho período. Adicionalmente, es probable que los recientes controles de la AFIP hayan contribuido también a que muchos individuos desistieran de seguir realizando esta operación, luego que este organismo enviara intimaciones por inconsistencias en los ingresos declarados a unos 75.000 contribuyentes que realizaron compras de divisas a través de este mecanismo.
En suma, una menor venta de “dólar ahorro” implicó una menor oferta de divisas para el mercado informal, el cual ante un aumento de la demanda vinculada a las últimas noticias pre-electorales se tradujo casi automáticamente en mayores precios.
La desaceleración en el ritmo de crecimiento de los depósitos del sector privado durante junio también enciende una “luz amarilla”, dado que podría estar reflejando una pérdida de atractivo de las colocaciones en moneda local, como anticipo de mayores tensiones en el mercado de cambios. El ritmo de crecimiento mensual de los depósitos del sector privado, que había sido de 3,7% en abril y 3,4% en mayo, parecería estar descendiendo en junio (con la última información disponible) a niveles del 2,5%, especialmente, por una notable desaceleración en el incremento de los depósitos a plazo.
Afectadas también por el ruido pre-electoral, las acciones que cotizan en la bolsa local vienen desandando en junio el alza que habían registrado a inicios de 2015, con una baja acumulada del 10% desde sus picos de abril. Paralelamente, el nivel de riesgo país, que había descendido notablemente en el primer trimestre, manteniéndose estable desde entonces en torno a los 590 puntos básicos, también registró un salto en los últimos días.
Mirando para adelante, pese a que las expectativas de devaluación implícitas en los futuros del dólar que cotizan en el país y en el exterior no difieren a corto plazo, sí lo hacen para el año que viene, siendo ésta otra señal de incertidumbre. Asimismo, con la vista puesta en la brecha cambiaria, si bien la demanda por dólar “ahorro” podría repuntar en el corto plazo, no necesariamente ello se traduzca en una mayor oferta de divisas para el mercado informal. La proporción de compradores de dólar “ahorro” que los dejan depositados en los bancos viene en ascenso (pasando de un mínimo de 6% del total en octubre a casi un 9% en junio), a la vez que es probable que con la cercanía de las elecciones quienes accedan a esta operatoria e incluso retiren los dólares billete, los retengan en su poder, ante una creciente volatilidad cambiaria.
En suma, los ligeros movimientos de esta última semana podrían estar anticipando un escenario más inestable, en un futuro no tan distante.