domingo, 17 de abril de 2016

La semana en pocas palabras

Informe Económico Semanal del Banco Ciudad 

Con la ratificación esta semana, por parte de la Cámara de Apelaciones, de la decisión del juez T. Griesa tendiente a levantar las restricciones que impedían el pago de los servicios de la deuda restructurada, el país logró superar el último escollo que quedaba por delante para avanzar en la resolución definitiva del conflicto por la deuda. El gobierno se encuentra ahora en condiciones de salir a buscar financiamiento en los mercados internacionales para pagar a los acreedores que aceptaron la propuesta presentada en febrero pasado, operación que, de acuerdo a lo trascendido, tendría lugar entre el lunes y martes, para luego avanzar en el pago a
los acreedores el próximo viernes. En total el gobierno saldría a buscar un máximo de hasta USD 15.000 millones en títulos a 5, 10 y 30 años, USD 12.500 millones de los cuales estarían destinados a la cancelación de los acuerdos por la deuda en default.
Si bien un fallo de la Cámara en esta dirección ya se encontraba en buena medida descontado, no deja de ser cierto también que termina de remover la incertidumbre que todavía pudiera existir respecto a las posibilidades del país de salir a fondearse en los mercados internacionales, instrumento que constituye una pata esencial en la estrategia de estabilización y recuperación de la economía encarada por el nuevo gobierno. En este sentido, además de hacer factible la instrumentación de un proceso gradual de recuperación del equilibrio fiscal, la capacidad del gobierno nacional de salir a tomar deuda en los mercados internacionales a tasas y plazos más razonables, sumada a emisiones de provincias y privados, ayuda también a despejar el panorama respecto a la evolución que podría mostrar el frente externo a lo largo del año, y contribuirá, por ende, a restarle volatilidad a la dinámica del tipo de cambio.
En lo inmediato, esto tiende a reforzar las presiones a la baja que viene registrando la cotización del dólar. El precio de la divisa norteamericana cedió un 2,8% en las últimas dos semanas, tocando un piso de $14,30 este último viernes, en un contexto de elevados rendimientos en pesos que favorecen la oferta de dólares, y ante expectativas de crecientes liquidaciones de divisas por parte del complejo agroexportador. En relación a esto último, si bien las liquidaciones aún no alcanzan los niveles observados en años previos, producto de las lluvias que retrasan el avance de la cosecha, las perspectivas de mayores descensos en la cotización del dólar una vez que comience a verificarse una mayor oferta de divisas por esta vía, tienden a impulsar a otros exportadores a acelerar sus ventas y a los importadores a postergar sus compras. Esta situación, a su vez, acentúa las presiones a la baja del dólar en una dinámica que constituye un espejo de lo acontecido en el mercado de cambios durante el mes de febrero, en pleno derrotero alcista del tipo de cambio.
En lo que respecta a los rendimientos en pesos, el BCRA mantuvo en su última licitación las tasas de las Lebacs a 35 días en el 38%, nivel que supera claramente las expectativas de devaluación implícitas en los futuros del dólar. Éstas, que en términos anualizados se ubicaban en niveles de entre 27% y 31%, tras el fallo de la Cámara de Apelaciones pasaron a posicionarse entre 24% y 27%, profundizando aún más la brecha con los rendimientos que otorgan las letras del BCRA.
En este contexto, el Banco Central se ha mostrado más activo en sus intervenciones en el mercado de cambios, buscando evitar que la cotización del dólar experimente descensos pronunciados. Si bien sus intervenciones siguen siendo esporádicas, el BCRA llegó a alzarse con USD 114 millones la semana pasada y con otros USD 160 millones en los primeros 4 días de esta última semana. En comparación, durante el mes de marzo sus compras promediaron los USD 22 millones por semana (excluyendo en el cálculo los USD 500 millones provenientes de la emisión de deuda que realizara la provincia de Buenos Aires), lo cual representa menos de una quinta parte del promedio semanal observado en lo que va de abril.
Para finalizar, esta semana se conoció también el dato de inflación correspondiente al mes de marzo que, de acuerdo a la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, se ubicó en un 3,3%, experimentando una desaceleración de 0,7 puntos porcentuales respecto a febrero, y acumulando, de esta manera, un alza de 35% en los últimos 12 meses. En sintonía con este comportamiento, el promedio de las estimaciones privadas, agrupadas por el denominado IPC Congreso, arrojó una variación mensual de 3,2%, marcando una importante desaceleración respecto al 4,8% registrado el mes anterior. En términos interanuales este indicador verificó un aumento del 35,5%, ligeramente superior al capturado por el Índice de Precios de la Ciudad de Buenos Aires.