lunes, 15 de mayo de 2017

¡Otro brutal abandono de persona en el Evita!

  Cuando no nos habíamos recuperado del azoramiento porque una chica con sobredosis no fue atendida por la guardia del Hospital Evita (ver ayar) el sábado por la noche, llegó a la redacción de La Defensa la filmación de otro brutal abandono de persona por parte de ese mismo turno de emergencia: Allí dejaron sin atender durante casi cuatro horas a un hombre con la cabeza literalmente rota, entre otras lesiones que le habían producido durante un asalto.
  A las 0:00 del sábado -casi en punto- ingresó al Evita David Fernando Blanco de 42 años. Había sido asaltado y le dieron tal paliza “que me dejaron con una arteria fuera de la cabeza”, cuenta él mismo. El diagnóstico dice por su parte que recibió “heridas punzocortantes, con pérdida de conocimiento y abundante pérdida de sangre, y fractura de antebrazo derecho”.
  ¡Recién lo bajaron de la ambulancia del SAME (a la derecha) que lo había auxiliado y llevado a las 3:45! Pasa el tiempo, y el hombre, como continúa desatendido, se levanta como puede de la camilla y dice: —¡Ustedes no tienen vergüenza, hace más de tres horas que estoy acá y pasan al lado mío y no me atienden ni a mí ni a la gente que está acá! Yo de acá me voy- mientras un médico trata de retenerlo. Y ahí se acaba el video. 
En ese mismo video, aparece una enfermera (de azul en la foto) que se ríe de todos los pacientes que aguardan ser atendidos, y se enoja con los de la ambulancia del SAME porque le llevan trabajo. Y luego aparece en escena una mujer (de ambo verde en la foto) y echa a la
gente del SAME: —¡No me traigan más nada!- les ordena la increible mujer, que luego se supo que es la jefa de guardia.
  La grabación y el testimonio lo ofrece a La Defensa una fuente que pide reserva de identidad.
  La enfermera y la jefa de guardia del video, cuyas identidades desconocemos, reportan a la directora del Hospital Evita, Cristina Godoy.
  Al parecer el intendente Néstor Grindetti es inmune a lo que sucede en el principal nosocomio del distrito que administra.
Y al parecer la gobernadora María Eugenia Vidal no se da por enterada de lo que sucede en mataria de salud en su provincia, a pesar del impresionante escrache que recibió el jueves pasado durante su visita al Hospital Gandulfo de donde tuvo que salir por una puertitta de costado.