domingo, 9 de diciembre de 2018

La política nuestra de cada día: Camuninas** amarillas

por Omar Dalponte*

omardalponte@gmail.com

    Antes de entrar de lleno en el tema que responderá al título, nos permitimos dos comentarios previos: Lisandro Martinez, vecino de página en la edición gráfica de nuestro semanario y cuyos trabajos, publicados también en “La Defensa Digital” leemos y estudiamos, publicó, días atrás, una magnífica nota titulada: “No a la desaparición de La Defensa de Lanús en papel”. Con sumo placer hemos difundido dicha entrega periodística que pone en claro un tema de vital importancia, aporta valiosa información  y propone soluciones muy precisas. Se trata, sin dudas, de una nota de colección. Recomendamos pues su lectura y nos sumamos decididamente a su propuesta final: “Campaña popular por suscripciones”. Buena idea.

    Permaneciendo un momento más en el prometedor mundo de la izquierda argentina, consideramos interesante destacar los dichos de la socialista y dirigente nacional del Nuevo Movimiento al Socialismo (Nuevo Mas) Manuela Castañeira quien, en reciente conferencia de prensa realizada el viernes 7 de diciembre, en el contexto del VIII Congreso partidario  expresó:  “es un verdadero crimen que la izquierda clasista permanezca dividida: las luchas y las elecciones que se avecinan nos demandan unidad” y   entre otros anuncios agregó que  “hacemos un llamado a Luis Zamora y Autodeterminación y Libertad, así como a las fuerzas integrantes del FIT, a Néstor Pitrola, Marcelo Ramal y Nicolás del Caño, a que nos sentemos ya mismo a discutir las vías para la unidad de la izquierda”. Conocidas son las diferencias que existen entre nosotros los peronistas y los compañeros que integran las distintas variantes de izquierda. Pero en una situación tan grave como la que atravesamos los argentinos sufriendo la tragedia neoliberal, si somos conscientes que el enemigo del
pueblo es el macrismo, la propuesta de unidad del Nuevo Mas no deja de ser una buena noticia. Que parcialidades opositoras al macrismo acumulen fuerzas contra el enemigo común puede ayudar, en el futuro, a  entendimientos mayores para lograr  unidad más amplia en el campo popular. Saludamos esperanzados la iniciativa expresada por Manuela Castañeira.    
Cerramos nuestra columna con algún comentario que, creemos, puede ayudar a que no sigamos tragando mentiras.
   En medio de las luchas de las décadas de los años 50, 60 y 70 uno no podía imaginar que alguna vez la argentina estaría gobernada por gente como la que hoy ocupa la Casa de Gobierno. En aquel tiempo, principalmente  en los sectores juveniles,  se soñaba con un país y con un mundo en que, subvertido el sistema capitalista, la realización del socialismo era posible. En la Argentina de aquel tiempo, entre los avances y retrocesos de los sectores populares, se mantenía la esperanza de un triunfo definitivo de nuestro pueblo. Algunos creían que, si se triunfaba, era factible pasar del capitalismo al socialismo sin  paradas intermedias. Otros, para quienes la contradicción fundamental era liberación o dependencia, sosteníamos (y sostenemos) que en nuestro país, existiendo el peronismo como expresión política de masas, es factible avanzar hacia la colectivización de los medios de producción y de cambio pasando por una etapa previa de nacionalización y estatización de los resortes principales de la economía y de las finanzas con un gobierno que garantice la Justicia Social, la Soberanía Política y la Independencia Económica. Fue posible entre 1946 y 1955. Pudo haberse conseguido en otros momentos no tan lejanos. Pero el imperialismo y sus aliados locales, los grandes monopolios, no son presa fácil. Mantienen un poder enorme e ingentes recursos para someter a los pueblos. Los argentinos sabemos muy bien de que se trata. La lucha será larga. Y estamos obligados a librarla.
   Hoy, permanentemente, con la apoyatura de los medios de comunicación monopólicos como fundamental herramienta para confundir y engañar masivamente a la gente,  se pintan como realidades cosas inexistentes y se instalan seres muy limitados como  figuras relevantes cuando, son nada más que personeros de quienes mueven las palancas desde los centros de poder reales. Así se impuso a Macri comenzando por la presidencia de Boca Juniors. Así se presenta a individuos como Durán Barba como genios de la política cuando son nada más que personajes de opereta. El ecuatoriano no es otra cosa que un charlatán de feria, bien pago, ligado vaya saber uno a que intereses oscuros. Nada más que alguien a quien  le hacen poner la cara para ocultar a los verdaderos mandantes e ideólogos del macrismo. Como dice el tango, en las carpas de los globos amarillos “todo es grupo, todo es falso”, y para cada cosa siempre hay disponible una cortina de humo. Pero genialidad no les falta. Con esto de “orden y mano justa” van a obtener no poco rédito. Y a la vez hasta son capaces de elevar a Patricia Bullrrich a la categoría de heroína. Sería bueno que entre nosotros también existan algunos con la capacidad creativa de los enemigos que, con un par de frases han logrado convencer a mucha gente y ganar elecciones.
   (*) De Iniciativa Socialista

  (**) Camunina: palabra utilizada en varios países latinoamericanos,para denotar trampa,estafa,engaño,chamuyo