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martes, 30 de octubre de 2012

Persecución implacable


por Marcelo Caliente
marcelocalvente@gmail.com     
Seguramente con la intención de no entorpecer las dilatadas negociaciones por la renovación del vínculo con Mario Regueiro hasta junio de 2014, tal como se había acordado de palabra y con apuro para contar con el jugador al inicio del presente Torneo, en una entrevista radial  en la tira “Corazón Granate” –de lunes a viernes de 11:00 a 12:00 por AM 1140- el presidente de Lanús anunció que tal firma no se produjo aún, pero que es optimista respecto de la rúbrica que se produciría en los próximos días. Ojala se concrete pronto, pero no hay que omitir  que se acerca el final del vínculo con Regueiro, en diciembre del corriente año, y la situación puede convertirse en conflicto de partes. Es necesario recordar que el uruguayo tenía su contrato en dólares, y que la obligación de abonar en la moneda nacional establecía en sí misma un choque de intereses en el que las dos partes tienen razón: Por un lado, Regueiro percibía dólares que Lanús abonaba 3,50 pesos cada uno y tiene derecho a recibir
la misma suma, porque así lo dice el contrato. Pero por el otro, Lanús está impedido de adquirir esa cantidad de billetes estadounidenses y la ley lo ampara a pagar en pesos, pero con esos pesos el jugador no puede comprar la misma cantidad de dólares, por lo que sus ingresos se reducen en aproximadamente un 40%. Con buena predisposición de ambos se estableció un punto intermedio y la continuidad por dos años más, contando a partir del inicio del presente semestre. Pero por uno u otro motivo la firma se demoró, y si no se pone un punto final para su concreción, quien es hoy la máxima figura del plantel, llegará a diciembre en plena competencia, con buenas actuaciones, y con la posibilidad de elegir no renovar, y optar por negociar su pase al mejor postor. Sí Lanús le da el ultimátum y Regueiro no firma, la discusión será que hacer con él, y una de las posibilidades es que no vuelva a jugar. Lanús sabe que de así ocurrir, el equipo perderá su carta fundamental, pero Regueiro sabe que eso puede ocurrir y deberá tenerlo en cuenta a la hora de la decisión. Si no juega pierden todos, pero si juega, el mayor perjudicado económicamente será el club Lanús, que le servirá de vidriera y lo mantendrá en competencia, algo fundamental para la continuidad de un jugador veterano y que está cerca del final de su carrera.
Esta situación es consecuencia de una medida de gobierno respecto de la moneda estadounidense, una decisión que intenta mantener a la nación al margen en una crisis económica de alcance mundial y de ribetes preocupantes e infrecuentes, una crisis que indudablemente golpea y golpeará a las finanzas de los clubes argentinos por varios años. La mayoría, en un marco en general deficitario, sobrevivía transfiriendo sus mejores figuras, algo que por lo menos y por un tiempo indeterminado ocurrirá a cuentagotas. Lejos de actuar con precaución ante la coyuntura, mientras el mundo se cose los bolsillos, varios clubes argentinos salieron a gastar plata a lo loco, con la intención de armar planteles competitivos, incluso apelando a futbolistas de nivel internacional. Independiente, Racing, River, San Lorenzo, Newell’s y varios más, cuando todo aconsejaba lo contrario, gastaron un dinero que no tienen, que deberían cobrar los próximos años y que irremediablemente le faltará a las próximas conducciones que los sucedan. Se trata del dinero proveniente del estado, que tiene los derechos televisivos, y que la AFA adelanta irresponsablemente, ayudando a tapar agujeros para sostener el presente pero profundizando la crisis de esas entidades, que irremediablemente explotará de cara al porvenir. 
Varias entidades actuaron con cautela, como Unión, Tigre y Argentinos, que tratando de no comprometer el patrimonio no reemplazaron a las figuras que emigraron  por jugadores de calidad similar, hoy pagan su cordura ocupando los últimos puestos la tabla de posiciones, junto a Independiente y San Lorenzo, que se reforzaron con muchos futbolistas de renombre que ya no rinden a la altura de sus mejores tiempos. Newell’s pudo repatriar a tres grandes figuras, como Scocco, Heinze y Maxi Rodríguez, quienes sumados a los buenos valores surgidos de una cantera de tradición formadora, armaron un buen equipo y lideran el torneo sin haber conocido aún la derrota.
Newell’s marca el paso con 26 puntos, producto de 7 victorias y 5 igualdades en 12 partidos disputados. Detrás se encolumnan Vélez (23), Belgrano (22), Racing (21), Lanús (20) y Boca (19), cualquiera de ellos puede aspirar a ser campeón. Cada fin de semana, algún equipo de buen arranque se baja de la pelea, como Colón, Estudiantes y Arsenal. Otros como Vélez, Belgrano y Lanús, no por casualidad, se afirman como candidatos y persiguen al líder, obligándolo a ganar más y empatar menos para mantener la punta y obtener el título. Quedan todavía 21 puntos en juego, y nada está definido. Cada jornada presenta un desafío difícil de sortear para los de arriba, y el que tenga el temple necesario, mayores ambiciones, mejor juego, y porque no, algo de fortuna,  peleará hasta el final para levantar la Copa en diciembre.