El intendente de Malvinas Argentinas agasajó al ministro de Hacienda porteño con una picada en su despacho, con la excusa de hablar de gestión y de política. Pero en realidad los dirigentes se reunieron además para delinear la estrategia en caso de que al Pro no tenga otra alternativa que negociar con Francisco De Narváez para armar las listas para los comicios de este año.