viernes, 10 de junio de 2016

¡Salvemos a los caballitos de El Fortín!

La autora con un caballito

por Stella Maris Pina*

  He leído con detenimiento la nota de La Defensa del 1 de junio pasado, cuyo título es "Hectáreas muy preciadas" que relata lo ocurrido en el predio del Fortín Roca, de Prieto y Ayacucho, donde Stella la hija de Antonio Piacquadio relata la ocupación del predio por barrabravas de Lanús que responden al intendente Néstor Grindetti, y asimismo la nombrada manifiesta que habían sido intimados al desalojo por la Dirección de Relaciones Institucionales del municipio que preside Pedro Calavia.
   Lejos de querer interiorizarme sobre la fuente de dicha información, y felicitando al medio periodístico por la investigación realizada, quería poner en su conocimiento, además de todo lo relatado por la hija de la familia Piacquadio, que con certeza manifiesta que estas personas que han usurpado el predio carecen de papeles que acrediten propiedad, o en su
defecto autorización alguna, y que lo único que les motiva a realizar esta usurpación es instalar allí un centro de jineteada, que suponemos moverá sumas de dinero, todo esto desvirtuando los fines sociales y filantrópicos para los cuales se asignó dicho predio.
   Como organización sin fines de lucro, la Asociación Protectora Rescate Equino (APRE) realiza una encomiable tarea, no sólo rehabilitando a equinos que fueron víctimas del maltrato animal, sino la tarea de alimentar y atender la salud del único equino que realiza en dicho predio equinoterapia, según lo que fuera aprobado y establecido por la Dirección de Discapacidad de Lanús. Pero además APRE ha sostenido dicho predio, organizando una granja para fines recreativos de toda la sociedad del partido de Lanús, alimentando también a los equinos, que allí se alojan, y muchas veces se les ha facilitado vacunas a los equinos de estas personas que ahora usurpan el predio.
    APRE no realiza ninguna actividad con fines de lucro. Al contrario, han sido respetuosos de la familia Piacquadio, han cumplido todas las ordenanzas municipales, y han contribuido al embellecimiento del predio. En contraste, las mismas autoridades municipales ni siquiera han retirado la viruta que diariamente se elimina de la limpieza de los boxes.  Y la situación actual por la que atraviesa APRE es desesperante pues esta gente ha intentado desalojar a los caballos y animales que allí permanecen, y ha atentado contra su salud al evitar el ingreso de alimentos para los caballos, desalojando también a cualquier posible colaborador, pues en el predio permanecen solamente dos mujeres y un hombre, que tienen que permanecer en guardia todo el día, ante las amenazas de esta gente de "sacar los animales a la calle y comérselos a algunos de ellos".
Nuestra pregunta es: ¿Por qué? Porque esta gente tiene de rehenes a animales que se encuentran en recuperación, maltrata a dos mujeres que lo único que hacen es proteger a los caballos rescatados, que ya bastante sufrieron el maltrato, algunos al borde de la muerte. Y no permite el ingreso de los padrinos y madrinas que todos los sábados colaboramos con estas personas, que por su tarea no perciben sueldo ni ganancia alguna, porque nosotros tenemos también derecho pues contribuimos para que estos animales no vuelvan al calvario que los llevó en un estado deplorable a ese lugar, y allí fueron rescatados y rehabilitados.
  Por esta situación se han cursado las pertinentes denuncias penales, y se está a la espera de una resolución judicial, esperando que la Justicia se expida en forma independiente y no sujeta a los intereses espúrios de personas inescrupulosas.
Por tal motivo invito al periodismo para que mañana sábado por la tarde concurra al predio del fortín para cerciorarse de que lo que aquí se escribe es la pura y definitiva verdad, y esta debe prevalecer por ante tanta injusticia a la que estamos sometidos, y con ellos, no nosotros, sino los animales a quien nosotros respetamos y deseamos sigan teniendo una vida digna, que sólo APRE les puede dar a través de su labor desinteresada.  Deseamos contar con el apoyo de la comunidad, sólo la sociedad mirará con inteligencia y prudencia, y muchas veces necesitamos de las voces de periodistas que pongan a la luz, la verdad.
  (*) Abogada y madrina