por Lisandro Martínez*
Charles Fourier -1772/1837- un socialista utópico, sostenía que la situación de las mujeres era el termómetro del nivel de civilización de la sociedad y marcaba el índice de progresividad o retroceso que esa sociedad transitaba. Estas tempranas conclusiones sobre el rol de la mujer -formuladas por quien pronosticó en el siglo XVIII la aparición de partidos de trabajadores- fueron asumidas luego por el socialismo científico.
El rol de la mujer y su emancipación estuvo siempre ligado al socialismo revolucionario ya que con la emancipación femenina de cualquier tutela de la sociedad se avanzaría hacia el progreso cultural, social y económico que garantizaría y garantizará a todo el género humano el libre desarrollo de sus facultades.
El nuevo aniversario del día internacional de la mujer en Argentina nos encuentra con pocos y pobres avances en el terreno del aborto legal con la limitadísima ley de los Fernández cuya “objeción de conciencia” ilegaliza por orden del reaccionario Bergoglio un derecho de la mujer.
Por lo tanto en Argentina según las leyes las mujeres no son dueñas de su útero ni de su genitalidad, ya que los jueces son quienes tienen la última palabra acerca de la contraconcepción, mientras la patronal y la burocracia sindical aplastan sus derechos todos los días en el ámbito del trabajo asalariado, combinando persecuciones y naturalizando el acoso
Las persecuciones a las trabajadoras más activas tiene todo tipo de coacción como cambios de destinos, horarios, recarga de tareas, etcétera, para disciplinar.
Los sindicatos burocratizados tienen textos retóricos y sin ninguna medida concreta para la
mujer escritos por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cuya delegación argentina siempre tuvo enemigos jurados de los trabajadores: Armando Cavallieri, Carlos Tomada, Gerardo Martínez, Héctor Daer, Julio Piumato, Sergio Sasia, Pablo Micheli y Luis Pandolfi y los empresarios Daniel Funes de Rioja y Miguel Acevedo, de la UIA.
En el terreno laboral la burocracia sindical es “el capanga” de los concesionarios del ferrocarril, los sindicatos son quienes imponen las reglas de trabajo y son correa de transmisión de los intereses patronales, así impiden asambleas que debatan y voten medidas por sus derechos.
La tarea central de las trabajadoras es establecer un protocolo de necesidades de género que no están presentes en la relación laboral actual. En ferroviarios lo más degradante es que no hay baños, ni vestuarios ni duchas exclusivos para las ferroviarias.
Las profesiones más importantes de cada actividad laboral deben estar abiertas a las mujeres y la selección mediante examen público, debe realizarse en función de la habilidad y capacidad de las personas y no en razón del sexo del postulante.
En el ferrocarril los 4 gremios burocratizados son misóginos llegándose al escandaloso nivel de Omar Maturano de La Fraternidad, que considera que las mujeres no pueden conducir trenes por su inestabilidad emocional.
Para desmisoginizar las actividades en el ferrocarril y en otros gremios hay que ingresar mujeres en todas las áreas, guardas, boletería, tráfico, conducción, etc. Las compañeras deben imponer sus reclamos de género en cada una de las mismas porque de otra forma eso es una valla que impide el desenvolvimiento de las compañeras.
Jornada de 6 horas para abrir el tercer turno de trabajo e ir a la incorporación de hijos y familiares de ferroviarios mediante la bolsa de trabajo en manos de los obreros organizados quienes deberán elegir anualmente una comisión de familiares que presente públicamente con nombre y apellido en qué posición van colocándose los candidatos y porque méritos. La posibilidad de ingresar familiares es nula porque la bolsa de trabajo la maneja arbitrariamente la UF que ingresa patoteros o sus relaciones estrechas.
De los ascensos y concursos a otras categorías con mejores salarios nunca hay publicidad por lo tanto siempre es pasto para consumo de las relaciones de la burocracia.
Comisiones electas de ferroviarias por estación para investigar, combatir e impedir el maltrato misógino y el acoso sexual.
Inmediata construcción de baños y vestuarios exclusivos para las ferroviarias en las 70 estaciones de la línea Roca.
Día femenino.
Pago de las cuotas de guardería con la presentación de los recibos.
Salario mínimo inicial igual al costo de la canasta familiar indexada. Salario completo que garantice el cálculo de vacaciones y aguinaldo.
Pase a planta de toda/os los precarizada/os. No a las empresas tercerizadoras en el ferrocarril. Todos los trabajadores ferroviarios bajo convenio. Reincorporación de los 5235 despedidos/as.
Comisiones obreras de Seguridad e Higiene electas por sector y turno para garantizar que se aplique el protocolo obrero frente a la pandemia, en todas las especialidades y se combata la inseguridad laboral.
En las estaciones desarmar el peligro latente que significan las instalaciones eléctricas y donde en épocas de lluvias con innumerables goteras en inundaciones los cables cuelgan por doquier.
En Control de Evasión instalación de estufas aéreas.
Abrir el debate en cada sector para revisar el proceso de recategorización general de los compañeros. Cursos de formación profesional abierto a todos los ferroviarios y ferroviarias sin discriminación de género, ni ideológica.
Los horarios y puestos de trabajo serán sólo modificados a pedido de los trabajadora/es. Queda vedado utilizar los traslados como castigo. Sin la expresa autorización del trabajador no podrá producirse ningún cambio en la modalidad ni de horario ni de destino.
Comisiones electas de ferroviarias por estación para investigar y combatir e impedir el maltrato misógino y el acoso sexual.
(*) Del Partido Obrero Tendencia
