Frente
al siniestro vial en Hipólito Yrigoyen y 25 de Mayo, donde un automóvil
atropelló a tres mujeres, Norma Bonelli, la presidente de la Asociación Civil
Carla Arduini y mamá de Carla, expresó que “este incidente fue provocado por no
cumplir las normas de tránsito ni respetar al prójimo”. Y
recuerda que “desde la asociación se comenzó a pedir al entonces intendente
Manuel Quindimil el cambio del cruce peatonal en esa esquina para evitar que
hubiese víctimas como mi hija, que fue atropellada por un camión que cruzó sin
respetar el semáforo y la mató”. Fue en los últimos meses de estar Quindimil al
frente de la intendencia y no se obtuvo respuesta.
El
pedido fue reiterado varias veces al posterior intendente, Darío Díaz Pérez, y
se le solicitaba que corriese la senda peatonal a veinte metros de la esquina,
“para que los vehículos que circulasen por Hipólito Yrigoyen tuvieran que
frenar antes de llegar al cruce con 25 de Mayo”, expresó. Se reiteró varias
veces durante su mandato pero recién en el último año como jefe del estado
municipal decidió cambiar el cruce peatonal en mitad de la cuadra, “sin prestar
atención a la sugerencia de la asociación”, indicó.
Durante
el Gobierno de Néstor Grindetti, como ya se había hecho ese cambio de cruce
peatonal, se hizo otro cruce en la otra cuadra, frente al Instituto Kennedy, a
15 metros de 25 de Mayo (foto). Pero
no alcanza. Los peatones siguen cruzando por la esquina, sin pensar que son
potenciales víctimas. Y muchos conductores siguen siendo irresponsables. Frente
a lo sucedido recientemente, es de esperar que Julián Álvarez le preste más
atención a la seguridad vial, con campañas de concientización en esa y otras
esquinas peligrosas, con agentes de tránsito, debidamente preparados,
trabajando intensamente. Porque
la vida vale.
Marta
Santos