viernes, 15 de julio de 2016

El diagnóstico de la obesidad

por Alejandro Chitrángulo

La obesidad se define como el exceso de la cantidad de grasa total del cuerpo como resultado de un desequilibrio entre la ingestión calórica y el gasto energético. Diagnosticar y clasificar es el primer paso para el adecuado tratamiento de un problema de salud. Esta tarea siempre difícil se complica aún más en entidades complejas como la obesidad en las que una susceptibilidad genética interacciona con un ambiente determinado por factores psicológicos y económico-sociales. Determinar la situación
particular de un paciente dentro del heterogéneo espectro de la obesidad requiere de un trabajo clínico y de exámenes de laboratorio complementarios. 
Por último, debe enfatizarse que muchas de las expresiones de la obesidad y sus comorbilidades son un fenómeno funcional que puede modificarse hacia su mejoría o empeoramiento. 
El diagnóstico de sobrepeso u obesidad no depende solamente del estado de cada persona. Los médicos con un peso normal tienen más posibilidades de hablar con sus pacientes del sobrepeso u obesidad. A dichas conclusiones llegó una nueva investigación conducida por Sara Bleich, una especialista en salud pública de la Escuela de Medicina 
Johns Hopkins de Estados Unidos. 
Los médicos con un índice de masa corporal normal hablan más frecuentemente con sus pacientes de los problemas de sobrepeso. Además, tienen más confianza en su propia 
habilidad para dar dietas y consejos sobre actividad física, y perciben que sus recomendaciones son confiables?, afirma la experta, que publicó sus conclusiones en la revista Obesity. 
Salud de a dos
Investigaciones previas encontraron que sólo un tercio de las personas con sobrepeso u obesidad reciben recomendaciones por parte de su médico de cabecera. En el nuevo estudio, Bleich analizó qué hace que los profesionales de la salud hablen del tema con sus pacientes o lo dejen pasar.  La especialista trabajó con 500 médicos clínicos o de familia. En primera instancia calculó su índice de masa corporal, una medida que relaciona la altura con el peso para registrar la presencia de sobrepeso u obesidad. A continuación, Bleich se fijó si hablaban con sus pacientes del sobrepeso u obesidad y si les ofrecían recomendaciones 
sobre el tema. 
Los investigadores encontraron que los médicos con un índice de masa corporal normal estaban mucho más predispuestos a diagnosticar a sus pacientes de sobrepeso u obesidad. A su vez, también conversaban más fácilmente con ellos de los problemas de salud que generan estas patologías, como las afecciones cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, diabetes tipo 2 y depresión. 
  Estos profesionales de la salud mostraron, a su vez, más confianza en sí mismos para ofrecer tratamientos y recomendaciones. 
  “Es posible mejorar la eficacia de los médicos para tratar a los pacientes con sobrepeso u obesidad al enfocarse en su propio bienestar y mejorar la calidad del entrenamiento sobre problemas de peso que reciben en las universidades. También es recomendable que reciban educación constante sobre el tema aun cuando ya se recibieron”, asegura Bleich.