viernes, 9 de agosto de 2013

8A: Pocas cacerolas, mucho piquete

  Anoche frente al municipio -uno de los sitios de convocatoria de los organizadores del 8A, se dio cita poca gente- pero sorpresivamente, poco antes  de las 20:00, llegaron marchando desde la estación unas
cincuenta personas, que con mucha agresividad, amontonaron bolsas de basura les prendieron fuego y sobre la avenida Hipólito Yrigoyen a la altura de Rico, cortaron el tránsito, y centenares de vehículos quedaron sin salida y a merced de las patadas y trompadas de los piqueteros, cuando intentaban salir del brete.

  La Defensa pudo averiguar que la protesta era porque un camión de la Municipalidad de Lanús, había matado en cercanías del Cementerio de Lanús, en la calle Aguapey, a un joven de 20 años, Javier Acuña, vecino del lugar, el día anterior y aún no le entregaban el cuerpo de la víctima a la madre. Increíblemente, los manifestantes se negaban a dar mayores informes ante la requisitoria periodística e incluso a la mamá de Acuña, una joven la sacó intempestivamente cuando le aportaba estos pocos datos a La Defensa. ¿Por qué esta inexplicable actitud? Nadie lo explicó.
Mientras, los piqueteros reclamaban a viva voz que el intendente los atendiera y cuando el vicejefe de Seguridad, Pablo Nagode, salió de la comuna y les dijo que el jefe comunal no lo iba a recibir,comenzaron a quemar pasacalles y arrancar carteles y afiches, pertenecientes a Darío Diaz Perez y su gente. 
Entretanto, la gente reunida (foto, arriba) ante la puerta por el 8A, amendrentada por la inquietante presencia de la gente vecina del cementerio, optaba por retirarse de allí.
Eran las 23:00 y los integrantes del piquete aún estaban allí (abajo).