sábado, 11 de julio de 2015

Seguridad: ¿Objetivos cuantitativos y cualitativos?

por Ramón Lobo*

 ¿Deberían los gobiernos respetar las plataformas políticas de los partidos que los encumbraron en el poder?  Digo esto por las políticas que en materia de seguridad se llevan en la provincia de Buenos Aires desde hace 20 años. Recordaré al por entonces gobernador Eduardo Duhalde, decir que en los tiempos que corrían -años 1994/95- la delincuencia se movilizaba en autos y motos, y quer por ello era ineficaz el sistema de prevención de policías de calles de a pie. Se lanza entonces un programa de seguridad en forma rimbombante (¿similar a la puesta en escena del actual?) con la adquisición de móviles importados de la República Federativa de Brasil, los cuales a los
pocos años dejaron de funcionar en razón que la provisión de repuestos no fue la adecuada. En esa época las palabras eran: -Nos vamos a abocar al problema.  Nada se hizo. Ahora la consigna es: “el abordaje del conflicto”, y tampoco se hace nada. Sólo cambios de palabras con frases grandilocuentes, puestas en escena propias de películas de clase B, y en la actualidad la policía debería volver a patrullar las calles de a pie porque es una policía de “proximidad” (¿?). Me pregunto: el móvil circulaba tan rápido que se alejaba de la sociedad, digo por el modelo de los ’90.
 El salto cualitativo, es emplear ciudadanos con el sistema de estudios secundarios Fines por el que se obtiene el nivel secundario cursando 6 cuatrimestres, 4 horas de clase, 2 dias a la semana. Luego un curso de corta duración traído del sistema de la policía de Miami, de EEUU, diciéndose esto para acallar las críticas. 
  Soy profesor de estas academias locales de Policía, y trato de salirme del programa, enseñando a los futuros policías el respeto a las leyes y a la ciudadanía, sin ser un flojo o un  cobarde; a utilizar el arma provista en defensa de los derechos de los ciudadanos que son vulnerados por delincuentes y a respetar a estos colocándoselos a disposición de la justicia para que tengan un juicio justo.  Hago esto porque nada se ha hecho y nada se hará en materia de seguridad tomándose esta deuda pendiente en forma liviana. El gobierno federal niega que existen problemas de inseguridad, mientras en la ciudad capital de la Nación Argentina, operan tres fuerzas federales y una, la Policvía Metropolitana, en vías de creación, y poco se hizo, mientras que todos los intendentes del conurbano que quieren ser reelectos y los que por su mismo partido aspiran tener ese honor fijan entre sus metas los problemas de inseguridad.
Para paliar en forma definitiva esta situación en primer término debería identificarse una sola policía en el territorio bonaerense con móviles de un único color, y de un único uniforme que sea identificable y no dé lugar a dudas al ciudadano común, de que existe una policía que patrulla las calles. Por dar el caso en el partido de Lanus, existen móviles blancos, negros y naranjas –todos abollados, con ópticas delanteras y traseras rotas- los identificados como de la Policía tradicional en el sistema de Seguridad Comando de Patrullas Comunitarios, un sistema que ya falló y fue de una probada ineficacia, cuando como se dijera al principio lo impulsó el entonces gobernador Duhalde, decretando su defunción el gobernador Felipe Solaá.
  Hoy vemos móviles blancos y rojos y móviles rojos y celestes, de una mal llamada policía local, o seguridad ciudadana o algo así, con policías uniformados con un ropaje azul similar al que usan los agentes de tránsito municipales, sin utilizar además el cubrecabezas, carecen de la jerarquía que poseen, de escudos y emblemas distintivos, y sin dudas fue lo que hizo que el vecino de Remedios de Escalada disparara a los policías en la obscuridad porque tal como andan vestidos no se identifican plenamente como policías en servicio.  Deberá saber el ciudadano bonaerense que el salto cuantitativo o sea el ingreso de 12.000 efectivo, quedará nulo cuando obtengan el ansiado retiro los más de 6.000 policías que están en condiciones de obtenerlo y a quienes se los niegan. Los pocos que pueden retirarse deben iniciar y tener resolución favorable, en un juicio de administrativo de recurso de amparo en el fuero contencioso administrativo, y los más de 1.000 policías que estaban ya retirados y fueron convocados en forma compulsiva a prestar nuevamente servicios.
  (*) Comisario mayor (RA). Miembro de la Perón Vive.