lunes, 9 de octubre de 2023

¿El menemismo fue un paraíso o un infierno?


por Daniel Jorge Martínez*

El sábado por la noche escuché a Javier Milei en el programa de Mirta Legrand, hablar admirando a Cavallo y a Menem, y me estremecí, ya que en un segundo pasaron por mi mente mil imágenes y sentimientos. Reviví en carne viva los gobiernos de Carlos Saúl Menem y Domingo Cavallo, y fundamentalmente, qué me había ocurrido a mí y a mi familia durante ese periodo funesto de la Historia Argentina, periodo que nadie en los medios, ni en la política, comentan. Los más jóvenes tienen que saber qué ocurrió en ese periodo, cuando miles de personas perdieron su trabajo, la Argentina perdió sus ferrocarriles, los jubilados se morían literalmente de hambre. Sólo se habla de la convertibilidad, de la posibilidad de viajar al extranjero, y de los créditos para viviendas. Los políticos, abrumados y golpeados por el resultado de la PASO, con una ingenuidad increíble sólo discuten la agenda que propone Milei, no se dan cuenta que cada día más lo suben al caballo de la victoria. Milei, sólo habla de lo económico, y jamás habla de lo humano.  Milei, ha reconocido a Cavallo como uno de los mejores economistas de la historia, y al gobierno de Menem, como uno de los mejores de todos los tiempos. Los políticos opositores a Milei no advierten que allí en la exaltación del menemismo, está el talón de Aquiles de Milei y en vez de golpear al león ahí en este punto, siguen discutiendo la dolarización. La agenda de Milei

   Durante el gobierno neoliberal de Menem, con un crédito hipotecario pude acceder a mi vivienda, pude viajar al exterior, varias veces, el dólar, además de ser convertible 1 a 1 con el peso argentino,

estaba subvaluado, se viajaba con 2 pesos

Durante el gobierno menemista, un funcionario de Menem, llamado Alderete, fue interventor, de la Obra Social Bancaria, una de las mejores obras sociales de Argentina, pero esto, hasta la llegada de Alderete: este personaje aparentemente inofensivo, vació la Obra Social Bancaria y dejó al Policlínico Bancario, como una cáscara vacía. No advirtiendo el cambio que había sufrido la obra social bancaria, mi mujer embarazada concurrió a atenderse allí. Creíamos que era el mejor lugar. Habíamos elegido a ese lugar para que naciera nuestro hijo, y como no podia ser de otra forma, perdió el embarazo a los ocho meses de gestación, y ella, también estuvo a punto de morir.

   Cuando Milei, habla de la privatización de las jubilaciones, con tecnicismos todos económicos, se olvida de explicar -y además  ningún político opositor a Milei explica- algo fundamental de la privatización de las jubilaciones. Lo que no explican es qué va a pasar, y ya pasó,  con los ya jubilados  al momento de la privatización del sistema jubilatorio. Nadie explica de dónde van a salir los fondos para pagar esas jubilaciones, que van a ser jubilaciones residuales, y las va a seguir pagando el estado. Políticos como Milei y como Menem, consideran a todo gasto del estado, como algo demoniaco. ¿Entonces, cómo se elimina este gasto de las jubilaciones residuales pagaderas con fondos del estado? Es simple, eliminando de una u otra forma a los jubilados y pensionados de la jubilación residual. ¿Y cómo se los elimina? Es sencillo, con jubilación de hambre, nula o mala atención médica, malos tratos, desprecio hacia los viejos, resultado: la muerte. Es simple para alguien que cree sólo en lo económico y no en lo humanos.

   Mi padre, un jubilado, un tipo muy bueno, trabajó hasta un día antes de morir (trabajaba siendo jubilado, no le alcanzaba para comer con su jubilación del sistema residual). Recordemos que la jubilación se privatizo en 1994, y a los jubilados existentes, se los derivó a un sistema residual jubilatorio. Mi padre fallece en 1996, mi padre se descompone y la primera vez en su vida que utilizaba el PAMI, es ingresado en una guardia de una clínica prestataria del PAMI. En esa época el PAMI menemista, no les pagaba a las clínicas prestadoras en fecha, las clínicas no les pagaban a los médicos, la atención médica era parecida a la atención médica de África. Mi padre llegó a la guardia, y estando enfermo, fue maltratado al igual que su familia, mi padre fallece luego de haber estado sin atención durante más de 10 horas. Esto era el menemismo 

Cambiaria mis viajes y mi casa por tener hoy 2023 a mi hijo Milton vivo. Hoy tendría 27 años, cambiaría mi casa y viajes menemistas del 1 a1 por haber visto morir a mi padre de una forma digna, humana. Mi caso, no es único, puedo asegurar que se repitió miles de veces. No demos un paso hacia el precipicio vecinos de Lanús, estamos a tiempo, lo humano está primero, y lo económico viene después 

     (*) Certificado en Coaching Ontológico Internacional