domingo, 15 de octubre de 2023

La presencia de lanusenses en el Yategate, impresiona...

La primera reacción de Nestor Grindetti, cuando le preguntaron sobre el escándalo de Martín Insaurralde en Marbella, fue declarar que “no me meto en la vida privada de la gente”. Esa salida, a modo de escudo, la dijo porque él estaba avisado -por lo menos avisado- de que los negocios turbios de Lomas de Zamora estaban muy conectados con Lanús. Ahora, sendos artículos publicados en La Nación por Hugo Alconada Mon y por Juan Carlos Pagni, certifican que lo publicado en La Defensa el 5 de diciembre de 2017 sobre una investigación por fraude por 4.000 millones de pesos, lo tocaba de cerca al intendente lanusense en uso de licencia. La investigación judicial efectuada al -entonces prófugo- Eber Russo, había determinado que a este hombre “que fue el principal protagonista de ese escándalo, se le encontraron 77 propiedades, 240 autos de alta gama, ocho barcos y 35 camiones. En uno de los allanamientos, realizados por la policía bonaerense en un gran depósito de Lanús, apareció un auto puesto a nombre de Jesica Cirio. Una versión muy insistente indica que el galpón pertenecía al municipio a cuyo frente está Néstor Grindetti. ¿La maquinaria de lavado de los Russo estaba puesta al servicio de la política?”, se pregunta Pagni. Y puede encontar la respuesta en aquel artículo de La Defensa: Sí, el galpón se lo alquilaba a Russo el municipio y allí, tal como se consignara en la nota, se halló un auto de Cirio. Y es más: se ilustraba la crónica con una foto en la que aparecían Insaurralde, Cirio y Russo (foto).

Hoy se sabe la trama completa de esta relación, porque una nota de Alconada Mon revela que la impresionante mansión del matrimonio Cirio-Insaurralde en Banfield, está a nombre de Andrés

Ferrante, ex dueño de la disco lomense París, y papá de Priscila Ferrante, sobrina de Cirio y pareja -o ex- de Eber Russo.  Señala Alconada Mon que “la Justicia federal la investiga a Priscila como presunta testaferro del ahora exjefe de Gabinete del gobernador Axel Kicillof”.  Apunta la nota que “el hombre vinculado a Priscila -Eber- compró al menos 77 propiedades, entre las que figuran campos, chalets en Pinamar, pisos en Puerto Madero y dos departamentos en Miami, además de más de 200 rodados que incluyen autos, camiones y motos, sin contar ocho embarcaciones, joyas y montañas de dinero en efectivo. ¿Cuál era la fachada de Russo? Ser empresario. Pero en la práctica, según reconstruyó la AFIP en tiempos de Alberto Abad, era prestamista” y se dedicaba al lavado al lavado de activos, tal como lo consigna La Defensa en 2017, cuando el municipio le alquilaba el galpón en Lanús”, dice La Nación. 

De acuerdo a la investigación mencionada, las facturas truchas de Eber blanqueaban activos, “desde clubes de fútbol hasta al sindicato de camioneros de Hugo Moyano y al contador de Daniel Angelici”, entre otros.

Para Pagni, “la trama de intereses relacionados con el opulento Insaurralde lleva también a empresas de servicios eléctricos. Se menciona, en la primera fila, a Servilum. Es una compañía que realiza el mantenimiento del alumbrado público de Lomas de Zamora y Almirante Brown. En el municipio de Lomas todas las versiones apuntan que pertenece a un hijo de Insaurralde, aunque no está puesta a nombre de él. Uno de los proveedores de Servilum es la empresa Jeluz, de materiales eléctricos. Otro avisador inesperado de los programas de Jésica Cirio”. Cabe aquí acotar que Jeluz esponserea a Independiente, el club de los amores y del que son dirigentes Grindetti, Cristian Ritondo y Carlos Montaña, éste último el director de la Unidad Ministro del Ministerio de Seguridad de la provincia, hombre que está siendo investigado por blanqueo de dinero en los EEUU. 

Y la nota de Pagni avanza sobre otro lanusenses cuando dice que “Kicillof atinó a disolver la Jefatura de Gabinete, pero no tocó áreas bajo el control político directo de su colaborador más inmediato. Entre ellas está nada menos que el Tribunal de Cuentas, donde Insaurralde ejerce una influencia decisiva a través de Juan Pablo Peredo, quien fuera su vínculo más directo con el negocio del juego. Peredo era funcionario de Codere -del Bingo Lanús- la más importante operadora de bingos de la provincia. El Instituto del Juego es otro de los reinos de Insaurralde. Lo dirige Omar Galdurralde. Es un área política muy significativa porque allí Insaurralde convive con el candidato a presidente Massa. La segunda de Galdurralde es María Laura García, dirigente del Frente Renovador de General Conesa”.

La presencia entonces de lanusenses alrededeor del escándalo del Yategate, es abrumadora: Grindetti, los Ferrante, los Russo, Cirio, Galdurralde y algún etcétera, son personajes de estos pagos.