
Romero felicitó a los voluntarios por el trabajo realizado con los animales rescatados y puestos en adopción y al intendente por su decisión y compromiso de no matar a los animales, práctica que había sido tomada como método de frenar la superpoblación canina y felina.
Durante el acto, el distrito recibió un certificado por las mil castraciones realizadas y otro en reconocimiento por ser un municipio no eutanásico. Romero estimó que para fin de año, en Lanús se habrán llevado a cabo un total de cuatro mil castraciones.