miércoles, 30 de abril de 2014

Las reformas del organigrama

  Con la presencia de 23 concejales -Mabel Gagino estuvo ausente- se realizó la sesión de ayer en la que aprobó la ordenanza que modifica el organigrama municipal. El expediente estaba detenido esperando que el ejecutivo enviase más información respecto de la modificación presupuestaria que significarían los nuevos nombramientos pero en un acuerdo entre los diferentes bloques políticos pudo ser aprobado luego de hacerle algunas modificaciones. Estas modificaciones habrían determinado que se establezcan las misiones y funciones de las nuevas jefaturas, que son menos de las que figuran en el original enviado por el ejecutivo, y un nuevo organigrama definitivo incluyendo las reformas, en un plazo no mayor de 30 días. El resultado de las modificaciones sería que no haya aumento del presupuesto del área, ya que con la reestructuración de los cargos inclusive -según lo señalaron varios ediles- se produciría un ahorro en los sueldos del personal político. El expediente fue aprobado por mayoría de 20 a 3. Los que emitieron voto negativo fueron los concejales del Pro. Para Martín Medina: "Porque mantenemos nuestra posición: No creemos que sea momento para ningún nombramiento y no es verdad que no ocasione gastos mayores. Se olvidaron de sacar las cuentas con el aumento salarial nuevo, que sí va a influir en el gasto presupuestario. Además hay cosas más importantes que permitirle al intendente que a cada rato ande creando puestos nuevos”.
  Pero el que produjo demoras y discusiones fue el proyecto presentado recientemente por el Frente Renovador que solicita que se le cambie el nombre a la avenida Máximo Paz por el de Manuel Quindimil. Las reuniones y discusiones dieron lugar a que la sesión comenzara después de las 13:00 y estaba citada para las 11:00, y en el mismo recinto comenzó el debate antes que Héctor Bonfiglio la diera por iniciada. Fue así que los periodistas que estaban allí fueran conminados a quedarse en sus asientos y los colaboradores que estaban en la puerta de acceso se retiraran para que esa puerta se cerrara. Es que entre Nicolás Russo, Jorge Montero, Omar López, Emiliano Bursese y Heriberto Deibe se produjo un
debate que fue subiendo de tono hasta llegar a lo ríspido entre Russo y Deibe, quien votó por la negativa al cambio de nombre de la calle alegando que él había presentado un proyecto para ponerle el nombre del fallecido intendente a la avenida Rivadavia y que nunca lo habían tratado. Russo le contestó que "pasó un año y nunca te acordaste. Lo hacés ahora que nosotros presentamos el nuestro".
La cuestión es que luego de un extenso debate comenzó la sesión y estas propuestas sobre tablas fueron votadas con los resultados que se esperaban. La del cambio de nombre de Rivadavia fue apoyada por el oficialismo más Deibe con 9 votos, contra los 14 restantes. La propuesta sobre M. Paz dio el resultado inverso. 
Y otro proyecto, que propició Bursese sobre el cambio de nombre de la avenida Rodríguez por el de Raúl Alfonsín, también fue negada por el oficialismo, no obstante el alegato de Bursese, que dijo: "Me extrañan estas actitudes. Deibe nunca vino a pedir apoyo para su proyecto, pero no hay nada que discutir respecto de Raúl Alfonsín", destacando que esas discusiones no son razonables y "obedecen a caprichos y tácticas políticas".
Casi todos los concejales adhirieron a la idea que "Manuel Quindimil merece un gran homenaje y recordación", inclusive los ediles del FV, pero después votaron negativamente, inclusive Francisco Malvaso, quien luego de sus argumentos parecía que iba a votar a favor. 
La que mejor condensó la situación fue Noelia Quindimil, que expresó: "Me da pena que esto se convierta en una puja partidaria en lugar de destacar las virtudes de mi tío abuelo. Creí que ésto era lo que se iba a hacer hoy en el recinto."
 Los proyectos del massismo, de Deibe y de Bursese, pasarán a la comisión de Gobierno para ser tratados. Y se agregaría otro nuevo por el cuál el Pro pediría el nombre del extinto intendente para  Paso de Burgos, el barrio de Valentín Alsina donde vivió toda su vida.
                                                                                                                        Marta Santos