por Lisandro Martinez*
lisandromartinez47@yahoo.com.ar
Analizar los datos del delito que se está cometiendo y publicarlo es un deber del ciudadano hacia sus pares y en este caso hay que meter el dedo en la llaga –como dicen que hizo el apóstol Pedro-, para señalar la descomposición en regla de un régimen atroz contra los que viven de su trabajo.
En el anexo VII del acuerdo, los K determinan que el país desestima cobrar las deudas de Repsol con Argentina y que se hará cargo de las demandas económicas de terceros contra los españoles: particulares, empresa proveedoras, dueños de campos donde hay explotaciones petroleras… (Clarín 4/3/14).
El balance de YPF reserva u$s 2.550 millones para afrontar juicios. Según el Tribunal de Tasación “se consideraron los montos previstos por la empresa para pagar juicios y contingencias legales”. Para los auditores externos de YPF son cinco los reclamos más urgentes:
1) El promovido por el grupo norteamericano AES, que exige un resarcimiento de u$s 1.300 millones y Transportadora del Gas del Mercosur (del grupo argentino Techint), que exige otros 330 millones. El Tribunal Arbitral ya falló en mayo de 2013 contra YPF y está apreciando el monto indemnizatorio.
2) La Corte Suprema confirmó el fallo a favor de vecinos de La Plata, condenando por daños ambientales a YPF por la acción de la refinería y del poliducto La Plata/Dock Sud. YPF debe iniciar un plan de obras para cesar con la contaminación; el plan de obras deberá ser controlado por el Centro de Investigaciones del Medio Ambiente de la UNLP (diario Hoy 6.5.13). El monto de las obras no ha sido aprovisionado.
3) La indemnización pactada con el estado de Nueva Jersey por la cual Repsol e YPF acordaron pagar u$s 65 millones cada una y limitar su responsabilidad a otros 200 cada una
en el peor de los casos (www.ypf.com/InversionesAccionistas).
4) El cierre de 5.661 pozos abandonados no tiene acordado presupuesto, según el informe del Tribunal de Tasación en las comisiones de Minería, de Energía y Combustibles y de Presupuesto y Hacienda del Senado.
5) Existen además, según el informe de la Asociación de Superficiarios de la Patagonia (ASSUPA) y enumerados en la carta al Presidente de la Cámara de Diputados, de fecha 25/3/2014, cinco juicios contra Repsol, que desde diciembre de 1999 controlaba a la empresa YPF: el referido a la cuenca neuquina, se encuentra en la Corte Suprema y alcanzaría los u$s 5.000 millones, cifra reconocida en 2006 por Repsol ante la denuncia de ASSUPA y que no está incluido en el informe del Tribunal de Tasación. Conscientes de que existe un desfasaje brutal entre provisiones y hechos, los auditores externos de YPF dictaminaron: “Es posible que las pérdidas resultantes de dichos riesgos, si se resuelven en forma adversa a YPF, excederán por lejos las provisiones establecidas”.
Reservar sólo u$s 2.550 millones frente a las enormes deudas es la coartada a favor de los vaciadores y para que los contribuyentes se hagan cargo del muerto.
YPF/Repsol carece de un inventario acerca del daño ambiental y económico que ha producido con la extracción de hidrocarburíferos, no tiene evaluación monetaria del perjuicio en napas freáticas, fauna, bosques y habitantes.
¿No es sorprendente que el artículo 15 de la ley de expropiación de YPF, votado en su momento por mayoría oficialista, estableció que la petrolera seguirá como “sociedad anónima” y al margen del control que rige para empresas con participación estatal? Sólo así escapó del examen de la Auditoria General de la Nación y de la SIGEN, evadiendo el control que corresponde por la Constitución Nacional y la ley 24.156.
Se vuelve al modelo de vaciamiento tipo Eskenazi: Se establece una tasa de interés del 8,75% lo que supone intereses anuales de u$s 437 millones, pero la utilidad neta de YPF al 2013 fue de u$s 902 millones y el 51 %, ahora en manos del estado, son u$s 459 millones. ¡Nunca visto, los Nac & Pop comprometen al pueblo a pagar intereses por un monto casi idéntico al de las utilidades!
Kicillof en el Senado dijo: “La estrategia que tomó Repsol daba resultados inconvenientes para la soberanía hidrocarburífera, porque nos obligaban a importar. Mientras, a Repsol no lo afectaba y le daba más ganancias que producir en Argentina porque vendía a precio internacional lo que debía vender a precio nacional”.
Los entregadores Nac & Pop no se atreven a abrir públicamente los libros de Repsol para revisar la enorme estafa que produjeron en el país.
Mientras la ley de expropiación -artículo 10- establece analizar el patrimonio de Repsol que al 31/12/2012 es u$s 6.400 y el 51% son u$s 3.266, el Tribunal de Tasación sinvergüenza considera “justo” pagar u$s 5.000 millones, esto sin justipreciar el monto de los juicios por daños ambientales al país ocasionados por Repsol.
La no inversión de utilidades de parte de Repsol entre 1999 y 2011, según datos de la Comisión Nacional de Valores, implicó un vaciamiento del orden de los u$s 16.000 millones. Luego de 10 años Repsol dejó la empresa con sólo la tercera parte de las reservas de petróleo y menos de la cuarta parte de las de gas, con una producción anual de petróleo reducida en un 50 % y un déficit energético que se lleva entre u$s 12 y 16.000 millones al año.
Se han distribuido u$s 1.700 millones de dividendos por encima de las ganancias y de lo permitido por la ley; si se acredita el vaciamiento de la petrolera, ese delito genera una responsabilidad y los accionistas que participaron serían responsables de los daños y tendrían que afrontar los costos. Por eso en lugar de pagar hay que embargar a Repsol.
Varios datos más que califican a los vendepatria Nac &Pop: 1: El informe del Tribunal de Tasación le fue ocultado al Congreso de la Nación. 2: los equipos de perforación y alineamientos fueron valuados por Galuccio en u$s 30 millones y pretenden ahora pasarlos a u$s 60 millones c/u y son 25 (Decreto 927/2013). 3: Se consideraron como de Repsol varios pozos cuya propiedad es de distintas Provincias con eso se sumaron otros u$s 2.900 millones a la indemnización. 4. No existe documentación alguna que acredite cuales son las reservas petroleras de Repsol, sin embargo el Tribunal de Tasaciones las consideró en el orden de los 974 millones de barriles.
Que se abran los libros de YPF/Repsol; para adoptar una medida de sanidad pública hay que embargar a Repsol.
(*) Miembro del PO
