
Esta última”idea” del intendente presenta en sí misma más interrogantes que certezas. Por ejemplo:
¿Estos 473 aspirantes, se reciben en qué escalafón, el de oficiales o el de subboficiales?
¿Quienes les otorgan los ascensos?
¿Viven estos 473 efectivos en Lanús?
¿Quienes los manejarán operativamente una vez en Lanús?
¿Donde reportarán todos los días? ¿En la municipalidad, en la Jefatura de Policía o en las comisarías?
¿Adónde llevarán a los detenidos los policías “locales”?
El concejal Salvador Baratta (foto) el ex subjefe de la policía bonaerense, sintetizó la respuesta a estos interrogantes cuando afirmó que la policía comunal será en realidad un organismo del gobierno provincial, “va depender de una subsecretaría y no va ser una policía que puedan manejar los intendentes”. Y explica Baratta: “Los recursos van a bajar de una subsecretaria y los intendentes amigos del gobernador van a hacer un continuo manejo de favores”.