lunes, 25 de agosto de 2025

Grindetti y su karma con los barras

Grindetti en Paraguay, pidiendo
los puntos del trágico partido
El sábado por la noche, en una entrevista con A24, le preguntaron a Salvador Baratta -fana del Rojo de Avellaneda- su opinión sobre el caos que se vivió el jueves en el estadio Libertadores de América y el ex subjefe de la bonaerense Salvador Baratta, sin vacilaciones acusó a la dirigencia de los locales: "Cuando se ve la cancha liberada para que los hinchas de Independiente saque los palos que tenían guardados en el estadio para ir a pegarles a los chilenos, hay una sola que pensar: estamos perdidos". Luego Baratta recordó que "Grindetti firmó que dentro de la cancha no haya policía". Y  emparentó los trágicos hechos con la connivencia entre la política y lo peor del fútbol: "La barrabrava  trabaja para el político de turno", dijo.
Y no hay nada más que recordar lo que hizo Nestor Grindetti cuando asumió la intendencia de Lanús para darle la razón: Lo puso a Diego "Fanfi" Goncebate -por entonces jefe de la barrabrava del Grana- como guardia de corps, y lo hizo cargo del manejo de las cooperativas que hacían trabajos municipales. Luego sucedió un robo de sospechoso robo de sueldos de las cooperativas, con olor a "trabajo interno". Y más tarde cuando el Fanfi estaba preso por homicidio, fuentes municipales juraron que una camioneta de la comuna le llevaba víveres a Goncebate a la cárcel. Grindetti además, le dió algún conchabo al "Monito" Rodriguez, aquel en tiempos de Darío Diaz Perez concretó una toma sangrienta de la municipalidad. Grindetti -quien parece comportarse como si padeciera una especie de hibristofilia*- nunca desmintió estas noticias de La Defensa. 

(*) La hibristofilia es un fenómeno psicológico complejo en el que una persona siente una atracción hacia individuos que han cometido actos delictivos o comportamientos socialmente inaceptables.