lunes, 8 de abril de 2013

Negocios: “campeones” de DDHH destruyen evidencias en Campomar


por Lisandro Martinez*

lisandromartinez47@yahoo.com.ar

  En julio de 2012, la presidenta, el intendente Díaz Pérez, Electroingeniería, Rasin SA y el Concejo Deliberante a pleno, saludaron la construcción de un mega proyecto inmobiliario llamado Nuevo Valentín Alsina.
  En agosto de 2012, vecinos de organizaciones políticas, sociales e independientes, formaron la Comisión de Vecinos que denunciaba que en Campomar funcionó un Centro de Detención, tortura y fusilamiento. La Comisión contaba con una cantidad importante de testimonios de algunos vecinos que integraban la Comisión y otros varios, además de estudios de campo realizados por el antropólogo Aguirre y el periodista Juan Ayala. 
Rápidamente a través de la Comisión Provincial por la Memoria, en setiembre  se presentaron para testificar una decena de personas ante la Cámara Federal de Apelaciones de La Plata (CFALP). 
   Esos testimonios obligaron a que la CFALP dictara una medida cautelar en Setiembre y su extensión en octubre para evitar se destruyeran pruebas. Mientras esto sucedía la Comisión descubrió la existencia de un ex detenido desaparecido que testimonió dos veces en la CFALP con la constancia de haber sido detenido y torturado dentro de Campomar. En noviembre La CFALP decide acotar la medida de no innovar a un pequeño sector del terreno. 
   El 11 de diciembre la Comisión Provincial por la Memoria apeló semejante fallo y dos días más tarde el sobreviviente de Campomar se presentó como querellante en la causa sin que hasta el momento y pasados 120 días tenga novedades de la Cámara. Mientras tanto sigue a “full” la modificación de uno de los escenarios del genocidio que ensangrentó a la Argentina. Es importante conocer que utilizando este mismo protocolo de supuestos DDHH, se comenzó a construir –en Tigre- sobre el  Astillero Astarsa (otro campo de concentración) un proyecto de
especulación inmobiliaria llamado Venecia.
  Dos señalamientos: 1) desde 1976 a la fecha los partidos políticos que pasaron por el Concejo Deliberante y los que fueron gobierno municipal no mostraron voluntad por investigar el pasado represivo en Lanús y sus vinculaciones con quienes financiaron la carnicería. 2) A la CFALP -podemos decir como lo señaló el filósofo Maradona-  “se le escapó la tortuga” dos veces.
    La CFALP como cualquier juez habla por sus documentos y sus fallos y llama la atención que califique como “abusos del Estado” lo que son crímenes aberrantes. (ver Resolución Cámara de Apelaciones de La Plata 28/2/2013). 
  Como existe fehacientemente una línea de desacreditación del ex detenido desaparecido MV, entendiendo parte de la CFALP que puede haber estado implicado en actividades delictivas durante su militancia (secuestro de camiones con mercadería que se repartía en las villas), no debería tomarse su caso en consideración. Pero MV tiene acreditado que mediante torturas infligidas por personal militar y policial se le perforó el pene sin importar si militaba o era simplemente un delincuente. Entendemos que la CFALP no puede ni debe acordar con que a los delincuentes se los someta a torturas, por lo tanto este militante popular debe ser tenido como testigo vivo de la barbarie. 
   Bajo la presión inmobiliaria la CFALP resuelve levantar la medida cautelar en  Campomar – en algunos sectores-, luego llama a la Gendarmería a que investigue el terreno pero no las construcciones. Este criterio de seleccionar en partes al enorme predio situado entre las calles Molinedo, Liniers, Darraguerira y Avenida Remedios de Escalada, que tiene varias hectáreas es por lo menos curioso ya que se entiende que no fue a campo abierto donde se torturó ni donde estuvieron prisioneros los que luego desaparecieron y que los lugares de enterramiento no sólo funcionaron en el campo sino también en los sótanos que la Cámara Federal por desidia ni sabe de su existencia. 
  La Cámara en su resolución dice que el Equipo Argentino de Antropología Forense se expidió dos veces sobre como detectar restos óseos. “Pero no solamente de pan vive el hombre”, también existe la posibilidad de encontrar cápsulas servidas, ropas, instrumentos de torturas, etcétera. “Encontré entre 1983 y 1984 cerca del paredón que separaba la fábrica del predio (coordenada 1g) una campera de cuero con un orificio de bala en la espalda, otras ropas manchadas de sangre, precintos que pudieron ser utilizados como ligaduras y también un instrumento que sería una picana eléctrica; esos elementos los entregué al Diario la Voz que los publicó en fotografías” (Testimonio de SM, al Juez Schiffrin el 19/10/2012, en Campomar).
  SM también señaló que hace poco viajó con un remisero que le contó que sus dos tíos estuvieron detenidos desaparecidos en Campomar, uno de apellido Torres nunca más volvió y el otro que pudo escapar se llama Marcos Carabajal y ahora es camionero. Otro testigo HMM habló sobre helicópteros que bajaban en Campomar con un conocido de él, Marcos Altamirano, quien pertenecía al Batallón 601 de Inteligencia, quien le aseguró que el lugar era un centro de detención o chupadero. Además en el pasado ya se encontraron en (1g) dos calaveras como aseguró en testimonio TP. 
  En enero de 2013 la municipalidad envió una cantidad de empleados al predio con palas mecánicas y excavadoras a revolver los escombros del lugar donde exactamente el 19/10/ 2012 estuvo el Juez Leopoldo Schiffrin realizando la primer inspección ocular y luego tomó testimonio directo a 3 personas del barrio que se le acercaron acompañados por la Comisión de Vecinos.
   El juez Schiffrin que firmó en disidencia la resolución del 28/2/2013 y señala: “las explicaciones científicas nada aportan de interés a la investigación y me confirman que el tema Campomar debe profundizarse con la búsqueda de testigos, sobre todo de algunos que hayan estado detenidos en la fábrica y que según testimonios recogidos existen pero deben ser hallados”. 
  Respecto “al compromiso” de Rasin y Electroingeniería sobre que pararían las obras al momento de encontrar restos óseos, Schiffrin los considera “un avenimiento inadmisible en los juicios por la Verdad, porque en estos no pueden existir formalmente partes adversarias”. 
   La desidia y la discriminación han hecho que el proceso investigativo sea deplorable y una verdadera vergüenza nacional e internacional para los que se jactan de “derechos y humanos”. 
  Es el pasado que vuelve. “No hubo abusos no hubo excesos, son todos asesinos los milicos del proceso”.

  (*) Integrante del PO