martes, 20 de octubre de 2020

Palpitando el 17

por Omar Dalponte*


El reloj me dice que son las 22:00 del día 16 de octubre. Es el año 2020. Mañana el peronismo cumplirá 75 años.
Siento una extraña felicidad. Presiento que mañana ocurrirá algo que a los peronistas nos hará bien. Habrá festejos. Pero estamos en medio de una pandemia feroz. Parte de esos festejos se harán con cada quien frente a una computadora o portando un teléfono móvil.
Otra parte se hará en las calles. Hay muchos laburantes que andan con ganas de cantar al aire libre. Y cuando los "perucas" andan con ganas es difícil pararlos.
Yo tengo 82 y recién me pusieron el cuore a nuevo. Dicen que si me agarra el bicho de la peste tengo varios números como para sacarme el pasaje de ida al no sé dónde.
Tampoco puedo inducir a alguien a que salga porque la cosa del contagio está fulera de verdad.
¿Y entonces? Entonces espero. Espero el primer minuto de mañana. ¿Algún loco pondrá la Marcha? Me jugaría unos boletos a que si. ¿Y mañana?
Mañana dicen que habrá sol. Siempre hay sol. Pero me imagino que mañana brillará más que

siempre.
¿Y yo? ...no me voy a quedar mirando mi vida "como en el cristal de un charquito". Algo haré, con tal de devolverle con un sopapo militante la leche podrida a los macristas.
Y en ese " algo haré" me llenaré de lindos recuerdos. Mis muertos queridos resucitarán. Y con mi viejo, el abuelo Santiago y los tíos Victorio y Mario, los cuatro con su ropa ferroviaria sucia de grasa, con su alma y dignidad más puras que el cielo cuando el cielo està puro, volveremos a la Plaza de Mayo. Los cuatro estuvieron allí en aquel octubre. Los cuatro volverán conmigo y me contarán una vez más cómo, hace 75 años, fue la espera y cómo quedaron sin voz gritando... queremos a Perón!.
Y quién les dice... por ahí vuelvo a tener 7 años por un rato y estar al lado de mi vieja en el Lanús de mis amores... asustado, porque la veré llorar por Perón de quién se dice que está en cana. Puede ser que existan los milagros. La vida de cada uno es un milagro. ¿Por qué no? El llanto de mi vieja aquel día , verla llorar por el Coronel, quedó en mi memoria como una escena santa y laica. Como quedó en mí el aroma a pan caliente de sus manos... Si, algo haré... y no estaré solo... y regresaré del pasado con ganas de marchar hacia el futuro que, sin dudas, será peronista.

     (*) De Iniciativa Socialista