por Lisandro Martínez*
PronósticosEl economista turco Nouriel Roubini señaló: “Una crisis en Argentina puede tener consecuencias globales. Si Fernández derrota a Macri y hunde el programa de U$s57.000 millones acordado con el FMI, Argentina puede repetir la crisis del 2001. Eso puede llevar a un proceso de fuga de capitales, que provocaría una crisis en países muy endeudados como Turquía, Venezuela, Pakistán y el Líbano, y complicar la situación de países como la India, Sudáfrica, China, Brasil, México y Ecuador”. (www.redaccion.com.ar 29/9/2019)
Más cercano en el tiempo Financial Times del 5/2/20 dice que “Argentina se encuentra al borde de un nuevo default, que podría ocurrir en las negociaciones”.
El gobierno de los Fernández que triunfó dos meses atrás, nunca tomó un problema vital como es la caída del salario, en cambio miro para otro lado, sin revisar cómo se hundió el poder adquisitivo por abajo del costo de la canasta familiar que hoy es de $75000. El gobierno sin empacho muestra que tiene otras prioridades y en lugar de reforzar salarialmente al movimiento obrero y establecer una alianza para las próximas contingencias, trata a los trabajadores como a parias.
Los jubilados financian la fuga de capitales
Es en este cuadro que la Anses -una caja obrera- fue saqueada por el macrismo en u$s 30 mil millones.
El nuevo gobierno no estableció ni mencionó que va a tomar medida alguna de investigación ni reparación de esos fondos que fueron cambiados por títulos que se desvalorizaron en horas. A pesar que esta estafa, a los trabajadores y a los jubilados es notoria los funcionarios del Ministerio de Economía “del Alberto” tuvieron la desfachatez de señalar, que “el sistema previsional es inflacionario”.
Lo que realmente ha quedado al descubierto es que trabajadores y jubilados han sido financistas cautivos -a través de la Anses- de la permanente fuga de capitales impuesta, y
que ahora los Fernández en lugar de denunciarla, se hacen los tontos y continúan en la misma acción delictiva.
Los “patriotas k” capitularon
De entrada los Fernández mostraron incapacidad e inviabilidad política, al derrumbarse por las extorsiones de un sólo Fondo de inversión, Fidelity, que le impuso como serán los pagos de lo adeudado a gusto y piacere, sin que el gobierno levantará la vista de la mesa de negociaciones, esa postal mostró quien manda y quien es el mandado.
Como antes lo hiciera Macri -un títere fracasado de Trump- ahora son los Fernández que siguen la misma ruta, sin ninguna de las virtudes y con todos los defectos de una patronal derrotada y ladrona, que en dos siglos fue incapaz de defender a los trabajadores y contribuyó a destruir millones de horas de trabajo y al esfuerzo nacional de varias generaciones.
La permanencia de la burguesía nacional al frente del estado es una experiencia dañina, que está pidiendo a gritos que otra clase social colectivamente se haga cargo de dirigir una nación, poniéndole límites a especuladores y fraudulentos.
A Kicillof, el Fondo Fideltity le impusó el pago de la deuda provincial, negándose a aplazar el cobro del bono BP21 en cambio Fidelity, pidió el pago del 100%.
Vidal y Kicillof en el mismo bote y sin salvavidas
Algunos fernandistas “enrage” señalan que la deuda contraída por PBA, fue responsabilidad de Vidal pero ocultan 1) que el massismo (Frente con Todos), aprobó dos veces en la legislatura de PBA las tomas de deuda, que Vidal pidió se votaran. 2) que Fidelity tiene en su cartera el 20% de los papeles emitidos en 2011, cuando gobernaba CFK, lo que le otorgó al usurero, una palanca con la que trabó e hizo imposible al gobierno conseguir los números necesarios para pagar solo el 30%.
Según dicen, Fidelity buscaba el default en PBA, para presionar más duramente a los “patriotas k” en la negociación de la deuda externa nacional. Con todo esto el gobierno tuvo que mostrar sus cartas y saltó que no tenían, no tienen, ni tendrán un mango para pagar los u$s250 millones que vencieron el 26/1, de una deuda total de u$s750 millones.
Inutilidad democrática
Aquí se revela que la ley “de sostenibilidad de la deuda” que votaron 224 diputados y 65 senadores, no sirvió para contener la debacle en la PBA.
Los tres puntos elementales frente a una negociación por deudas son 1) reducir los montos, 2) alargar los plazos, 3) conseguir una quita de intereses. Este ABC no fue tomado en cuenta, nunca estuvo en la cabecita de Diputados, ni senadores. Los negociadores del Frente de Todos ni lo tuvieron en cuenta para garantizar, aunque fuera una efímera estabilidad financiera para el tembladeral argentino.
La incompetencia e ineptitud del congreso y del Senado acompaña como la soga al ahorcado, a los partidos del régimen, a los que fueron a mendigar a los organismos financieros (Massa y otros) a los economistas “que saben”, a todos los que se abren paso a codazos, mostrándose como los mejores pagadores de acreencias y a los que se llenan la boca de pagar una deuda impagable y se comprometen a gatillar. Esto arrastrara a todo el régimen político a una crisis de poder.
La quiebra de Argentina es inevitable
La deuda es impagable y la crisis en ese sentido se devorará al FMI quien así abandona su rol de “salvador” de los países endeudados. Hace solo meses atrás los capitalistas más concentrados de Wall Strett reclamaron que el FMI que había fracasado en Argentina, pagara los platos rotos de esa crisis soberana donde los principales fondos perdieron sumas inmensas.
No al pago de la deuda
Llamamos a una acción independiente de la clase obrera y los trabajadores
Ni un gramo de confianza en los parlamentos ni en los consejos deliberantes.
Plan de lucha de todo el movimiento obrero para garantizar una salida obrera
Investigación de la deuda bajo control obrero.
Ningún cheque en blanco a la sostenibilidad de la deuda.
NI referéndum ni ninguna historieta protagonizada por parlamentarios.
Abajo la ley vaticana de Emergencia Alimentaria votada por el FIT y todo el arco político que con el cuento del hambre refuerza los lazos punteriles y clientelares.
Nacionalización de la banca controlada por bancarios y comisiones obreras electas en asambleas.
Transporte y sistema energético bajo control obrero.
Centralizar con control de los trabajadores todo el patrimonio nacional para ordenar los recursos y poner en marcha un plan de industrialización nacional.
Salario mínimo de $75000. Jubilación mínima de 82%
Fuera el imperialismo
Gobierno de trabajadores
(*) Del Partido Obrero Tendencia