domingo, 5 de enero de 2020

The New York Times y su vendedor de ilusiones

por Lisandro Martínez*

En The New York Times trabaja desde 2001, Nicholas D. Kristof periodista y comentarista estadounidense, ganador de dos premios Pulitzer.
    Pero…“Aunque usted no lo crea” como decía Ripley, Kristof que se define como “un progre” a pesar de esto, llegó a la conclusión que el año 2019, fue “el mejor año en la historia de la humanidad” y para ello alega que “no murieron tantos niños como en otros periodos, se redujo la cantidad de adultos analfabetos y hubo menos personas que sufrieran enfermedades terribles”.

El 80% de la humanidad vive situaciones penosas
Las cifras del Banco Mundial contradicen a Kristof, indicando el 50% de los 7.400 millones de habitantes del planeta, pasan condiciones de pobreza e indigencia, con menos de U$s 5 diarios per cápita; mientras otro 20% está apenas arriba de la pobreza y el 10% tiene solo con recursos para mal alimentarse.
    Kristof oculta que la ONU revisó las perspectivas de América Latina y el Caribe en 2019, y auguró 0,1% de crecimiento del PBI y estima el 1,4% para el año 2020. Esto es a la baja. El PBI per cápita regional entre 2014 y 2019 disminuyó un 4%, que implica un retroceso de -0,8%. (www.news.un.org/es/story/2019/11/).
   Kristof que no es un improvisado, sino que maneja los mejores informes de la situación mundial, no puede ignorar lo dicho por la ONU.  No obstante, Kristof ha titulado en NYT del 30/12/2019: “Por qué 2019 ha sido el mejor año en la historia de la humanidad”. Y en su texto afirma que “me temo que los medios informativos y el mundo humanitario se enfocan
incansablemente en malas noticias que la sociedad termina creyendo que todas las tendencias se dirigen a la dirección equivocada”.

¿Qué canal mira Míster Kristof?
La pregunta del millón que no puede responder Kristof es cómo el capitalismo está muy por detrás del régimen esclavista Inca que reinó desde 1230 d.C. a 1534 d.C. dándole de comer a sus esclavos, proveyéndoles de una vivienda permanente y de una mujer.
   Hoy mal que le pese a Kristof, la tecnología de punta en manos de la patronal explotadora, es incapaz de reducir las jornadas de trabajo manteniendo el valor de los salarios. Además año a año el régimen justifica que miles de personas vivan en autos cuando no directamente en las calles del mundo y por sobre todo en el país capitalista más desarrollado. En Los Ángeles, California, en 2019 se contabilizaron 59.000 personas que viven en la calle en carpas y en coches. Peter Lynn director de la “Autoridad de Servicios para personas sin hogar de Los Ángeles” señaló: “Tenemos la mayor población “sin techo” en la nación y la mayor cantidad de “sin hogar” en todo EEUU. Solo New York tiene más personas sin hogar por noche”. Este bolo punch de la miseria creciente en EEUU golpeó duramente al propio Donald Trump quien tuvo que declarar en una entrevista a Fox News Chanel: ”hay que intervenir en la crisis de los desamparados de Los Ángeles” (www.laopinion.com 2/7/2019).
   Un régimen incapaz de darle de comer a sus esclavos, proveerles viviendas, medicinas, abrigo, etc. ha dejado de cumplir su función social y se encamina a cristalizarse en el museo de cera del horror. No obstante Kristof se relame en The New York Times del 30/12 con un dato que considera “una mejora histórica” y escribe “en algún lugar del mundo muere un niño cada seis segundos, pero tan solo hace un par de décadas, moría un niño cada tres segundos”, para este lobbysta que cada día mueran 14.400 niños por motivos evitables resulta un éxito.

Los paraísos fiscales
Pero lo que Kristof se niega a esclarecer es el sombrío escenario mundial permanentemente desequilibrado y que muestra persistentemente, una caída aguda de la tasa de ganancias.  Asi el capitalismo pretende reconvertirse -Brexit mediante- instalando paraísos fiscales al por mayor que produzcan dinero ficticio y cerrar el ciclo histórico productivo mandando a la quiebra al 80%, desatando una desocupación monumental.
   El inmanejable desenvolvimiento del llamado capital ficticio manifiesta la descomposición del capital cuya grieta indica que en los últimos 50 años se amplió la brecha créditos/PBI de los países industrializados en un: ¡350%! Ese es el nivel de deuda externa impagable que tiene a punto de estallar al “mundo civilizado” que antes garantizaba con producción industrial su desarrollo y ahora en sus gavetas tiene papeles sin respaldo.
   Las explosiones y crisis están a la orden del día y como lo anticipó un revolucionario alemán en 1848: Las crisis económicas alimentan por desmejorar el nivel de vida de las masas, levantamientos populares y revoluciones.
   Kristof cierra los ojos ante el cierre de puestos de trabajo en los países industrializados: EEUU, Alemania, Reino Unido, etc, donde se desarrollan paraísos fiscales a gran escala intentando cerrar la globalización dando un paso atrás en la historia para zambullirse en la fortificación de estados nacionales que tienen ya sus consignas de combate ¡Ahora América! es la de Trump, mientras VOX en España vuelve con “Todo por y para el trabajador español” y en Italia levantan "Orgullo italiano: Una patria que amar y defender".
   Este retorno tardío al nacionalismo ultramontano va a contramano de la historia, el epicentro de las formas nacionales se dio entre el siglo XII y el siglo XVIII y fue superado por el mercado internacional y de libre competencia llamado capitalismo que ha entrado desde hace rato en crisis, bancarrotas y claramente en agonía. Esto coloca al capitalismo, en una aguda contradicción entre el desarrollo avasallante de las fuerzas productivas y las relaciones de producción existentes que ponen a la orden del día la premisa histórica y económica de la revolución social como salida a esa contradicción que se ha transformado en encrucijada histórica y que no puede ser resuelta con Trump en EEUU, Lepen en Francia, Salvini en Italia, etc volviendo atrás el reloj de la historia.

Guerras y revoluciones
La crisis mundial plantea la reorganización social sobre nuevas bases sociales. Esta viva la conciencia humana sobre las profundas cicatrices que dejaron el fascismo, la guerra mundial, el holocausto y desde los 90 hasta hoy las masacres contra pueblos desarmados; Yugoslavia, Irak, Yemen, Libia, el Cáucaso, Ucrania, Palestina, Bolivia, Chile…y sigue la lista.
   Asi 2020 ya tiene su perfil definido y será un excelente año para satisfacer las necesidades de los trabajadores con la clase obrera gobernando.
Salud!

  (*) Del Partido Obrero Tendencia